Compuesto orgánico fenólico clorado, utilizado como sanitizante, antibacterial. Actúa en las membranas celulares como todos los compuestos fenólicos y así cumple su acción antibacterial. Eficaz en un amplio espectro de bacterias Gram positivas.

Antiséptico y bactericida apto para aplicación tópica. Su mecanismo de acción se basa en alterar la permeabilidad de las membranas celulares de los microorganismos. Se puede utilizar para limpieza de lesiones superficiales y heridas infectadas.

Posee proantocianidinas que impide la adición de las bacterias por lo que se explica su acción antimicrobiana. Es un potente antioxidante.

El aloe vera posee un acción cicatrizante de heridas, antiinflamatoria, inmunomoduladora y antiviral, antirritante, refrescante, etc. La cicatrización de heridas se debe fundamentalmente a una estimulación directa de la actividad de macrófagos y fibroblastos. “Estos últimos promueven un incremento de la síntesis de colágeno y proteoglicanos y como consecuencia, se favorece la reparación del tejido dañado”. El gel fresco de aloe utilizado por vía tópica ha mostrado una eficacia superior a la de otros tratamientos convencionales incluso en quemaduras térmicas. El aloe vera posee también posee propiedades hidratantes y emolientes. Contiene vitaminas A, B1, B2, B6, C, E, ácido fólico y minerales incluyendo calcio, cobre, selenio, zinc, cromo, magnesio, sodio, hierro, potasio y manganeso.

El extracto de pepino tiene propiedades hidratantes, descongestivas, antiedad, fotoprotectoras, estimulantes y revitalizantes. Por ello, en cosmética natural se usa para formular cremas, que protejan, nutran y revitalicen la piel, retrasando el envejecimiento. Por sus componentes fenólicos y Vitamina C, posee gran acción antioxidante.